jueves, 15 de diciembre de 2011

Epifanía

Jorge Guillén, considerado como el discípulo más directo de Juan Ramón Jiménez, es el poeta del optimismo cósmico. Su lema es: "El mundo está bien hecho". Y siguiendo este ideal encontramos un poema que viene como anillo al dedo para estas fechas tan señaladas. El poema muestra la realidad, oculta en la actualidad por un velo económico. Espero que recapacitéis un poco al leerlo...

Llegan al portal los Mayores,
Melchor, Gaspar y Baltasar.
Se inclinan con sus esplendores
y al Niño adoran sin cantar.

Dios no es rey ni parece rey,
Dios no es suntuoso ni rico.
Dios lleva en sí la humana grey
y todo su inmenso acerico.

El cielo estrellado gravita
sobre Belén, y ese portal
a todos los hombres da cita
por invitación fraternal.

Dios está de nueva manera,
y viene a la familia de obrero,
Sindicato de la madera.
El humilde es el verdadero.

Junto al borrico, junto al buey,
la criatura desvalida
dice en silencio: "No soy rey,
soy camino, verdad y vida".