martes, 19 de abril de 2011

Federico García Lorca y el final de su vida

Hace pocos días comencé a releerme el libro de poemas "Poeta en Nueva York". El principio de esta obra, exactamente el tercer poema, llamó especialmente mi atención con unos versos en los que el poeta parece que conociera y quisiera expresar su trágico destino siete años antes de su muerte. Ahí os dejo la última estrofa del poema, donde se encuentran los versos que tanto me impresionaron.

Cuando se hundieron las formas puras
bajo el cri cri de las margaritas
comprendí que me habían asesinado.
Recorrieron los cafés y los cementerios y las iglesias.
Abrieron los toneles y los armarios.
Destrozaron tres esqueletos para arrancar sus dientes de oro.
Ya no me encontraron.
¿No me encontraron?
No. No me encontraron.


¿Qué opináis al respecto?